viernes, agosto 24

31 días

Hoy todo normal. En la tarde fui a una reunioncilla que pretendía convocar a personas que trabajen técnicas de Agent-Based Modelling, yo nada más iba de mirona y a tratar de empaparme de otras experiencias. Fue un ejercicio interesante. De suerte llegó también S y éramos los dos únicos de economía, iban 2 chavas de ecología y 3 antropólogos-arqueólogos, estos últimos 5 con proyectos interdisciplinarios, que en la vida habría creído pudiesen hacerse. Todos ya tienen experiencia muy específica en ABM y creo que el grupo de discusión que se armó no puede dejarme mucho, pero iré la próxima semana que van a dar una sesión de ABM for dummies, porque algo adentro de mí me dice que esto tiene futuro.
Luego llovió y todo el camino a casa fue una brincadera de charcos. Solía amar los días de lluvia pero acá con el calor esa magia se pierde. Venía pensando en varias cosas y andaba de buen humor y en eso en un crucero no servía el semáforo y estaban dos oficiales organizando el tráfico; vi que los coches seguían parados entonces pasé la calle justo cuando el poli, que no me vio, dejaba el paso a los otros coches en sentido contrario al mío... el poli pitó su silbato y me gritó pero yo seguí avanzando porque pensé que iban a pasar los coches atrás de mí, hasta que me di cuenta que los que venían eran los de adelante... y, bueno, pues que entonces corrí para cruzar la calle pero casi choco con un ciclista y todo mundo pitando el cláxon... pffff, me sentí remal y por un momento volvió a mi mente esta idea de que mi muerte involucrará un coche atropellándome o algo así, porque estos incidentes me pasan 2-3 seguido.
Llegué a casa a leer y cuestionarme un montón de cosas alrededor del penúltimo ensayo de Tenorio Trillo "Liaisons Dangereuses" en De cómo ignorar. No he dormido bien esta semana así que el sueño me hace su presa y me quedo profundamente dormida en el sillón. Odio dormir de día. En eso (hora y media después) me despierto sobresaltada porque tocan insistentemente a la puerta. H-o-r-r-i-b-l-e, estaba tan sumida en mi sueño que desperté sin sentido del tiempo ni del espacio, no tenía la más remota idea de dónde estaba y casi casi de quién era. Me quedo parada porque no sé si abrir (reacción post-traumática después de mi ex-vecino acosador, pero ésa es otra historia). Siguen tocando y ya, abro. Una chica de la India a quien no le entiendo un carajo de lo que me dice. Le doy el avión pero ella me insiste y es cuando entiendo que me pregunta cómo prender el aire acondicionado. Es mi vecina y se acaba de mudar. Yo sigo medio atolondrada, al grado que ni cuenta me doy que salí descalza. Y ya, le enseño cómo funciona el aparato y cómo moverle y le digo que tenga cuidado porque el primer día que yo lo prendí la ventila del pasillo tiró agua. Se preocupa y le digo que bueno, que igual y en su casa no pasa. Me platica que está haciendo su maestría y nos enteramos que estamos en el mismo College. Hacemos migas y me despido. Vuelvo a mi apartamentito y ya, sonrío.
Sirva esta enredada estampa doméstica para conmemorar mi primer mes viviendo en este rincón del desierto de Sonora.-----------------------------------------

gabagaba,
esta mañana mientras pensaba en mi primer mes viviendo fuera de mi país me acordé de ti, que pronto cumplirás 3 años que dejaste México por apostarle al amor. El día que te fuiste Sonia y yo no dormimos para que no se nos pasara estar listas a las 6am y acompañarte al aeropuerto; llevabas tantas maletas y la pierna rota que no cabíamos en el coche y nos despediste ahí, afuera de tu casa. Pero nel, nos montamos en un taxi y llegamos antes que tú al aeropuerto y estábamos angustiadas de que ya te hubieras ido porque no te encontrábamos. Y tú llore y llore, porque eres aún más chillona que yo. Te casaste a los 2 meses y primero lamenté no haberte convencido de que no lo hicieras, por último me dolió no haberte podido acompañar ese día y firmar como tu testigo. Pienso un montón de cosas pero no te escribo porque te pones a llorar y creo que mejor tampoco escribirlas acá. Lo de siempre, que ya sabes que te extraño un montón, que eres la persona con la que más discuto y con quien más diferencias tengo, y aún así, te sigo queriendo como mi hermana. Y que cuando te extraño, pienso en que eres feliz porque uno es feliz cuando lucha por lo que quiere, y eso me pone contenta. Un abrazo. K...

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