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ya van a ser las 3 y no tengo nadita de sueño, ni cansancio, nada. Si me sintiera más segura aquí saldría a caminar. Afuera está fresco, el friíto de la madrugada en el desierto: 13°C es lo que marca el termómetro.
Me chuté más de 6 horas resolviendo un par de problemas de riesgo moral; me choca eso, tardarse las horas, darle mil vueltas, sufrirle, darse de topes contra la pared, pensar que si así estoy ahorita no voy a pasar los prelims... y así hasta la náusea, hasta el momento en que me doy cuenta que tenía un signo mal, que la restricción estaba incompleta, o de pronto me llega la iluminación divina que me hace entender qué es lo que debo hacer; entonces termino la tarea, la paso en limpio, la reviso, me doy cuenta que después-de-todo-no-estaba-tan-difícil y me siento en paz. Bien divertido, como la vida misma.
Quisiera platicar con alguien, pero nadie está conectado, todo mundo parece dormir o estar ausente. Pero no es grave.
Hace un par de semanas me sugirieron mudarme a compartir una casa. En el instante puse mi cara de ich pero ya después de platicarlo un rato como que me animé. Luego me puse a pensarlo bien y no ahorraría mucho, quedo casi tablas, pero tendría compañía. Mhmm... decidí ver más allá de mi intuición y después de una semana de observar a las niñas con las que compartiría vivienda me di cuenta que no andaba tan errada, que era nomás cuestión de tiempo para que eso explotara. Aún así lo pensé otro poco y me di cuenta que pese a todo, valoro mucho mi tiempo a solas, la libertad de hacer lo que quiera, desde dejar la puerta del baño abierta, hasta hablar por el skype de madrugada, o reír a carcajadas con lo que leo (o con lo que me cuentas), cantar a grito tendido (como ahora que escucho a Pixies-Cerati-Auténticos Decadentes), o llevar mis horarios de trabajo y descanso a veces tan excéntricos, o sentarme en el sofá, hecha bolita, viendo hacia el infinito (un punto fijo), sumida en mis pensamientos/sentimientos, y que nadie me cuestione. Así que decidí, que no, gracias. Creo que sólo volveré a compartir un hogar con quien también decida compartir mi vida y mi cama.
En fin, aprovecharé el tiempo productivamente: referee report para el lunes (¡y ya! estoy prácticamente libre de esa asignatura ¡viva!). Al menos, si bien el tema no me interesa mucho (¿switching costs in the television industry? ¡bah!), está extraordinariamente bien escrito y eso facilita las cosas.