jueves, enero 31

dos rimas dos

Hace poco platicando con un amigo muy querido, salió un comentario sobre poesía y le contaba que hacía mucho que no leía prácticamente nada y que de lo poco que he leído, siempre he mantenido esta predilección por las rimas de Gustavo Adolfo Bécquer, aunque suene a niña de secundaria eternamente enamorada. Justamente hoy recordé dos de sus rimas y como no se me ocurre qué otra cosa hacer más que exhibirme aquí, ahí van.

Después de la amenaza de bomba o lo que sea que pasó hoy en la facultad, razón por la cual tuvimos que evacuar el edifico y perdimos dos maravillosas horas de productividad laboral, regresé a trabajar en mi tarea de métodos recursivos, algo que me tiene sufriendo toda la semana porque de plano no veía por dónde. Tras un par de horas de darle vueltas al tema llegó ese momento de iluminación en donde juro que se abre la gloria y el entendimiento se apodera de uno. Es como si una venda se cayera de los ojos y lo que parecía ininteligible cobra sentido y hasta resulta bello. Así es que recordé la rima XVII:

Hoy la tierra y los cielos me sonríen;
hoy llega al fondo de mi alma el sol;
hoy la he visto.., la he visto y me ha mirado...
¡Hoy creo en Dios!

Pueden cambiar la línea de hoy la he visto.., la he visto y me ha mirado... por hoy le entendí, lo ví y lo resolví... mi problema de programación dinámica... y no exagero, de verdad me emociona entender algo.
Claro que la felicidad dura un pestañeo y después de otro par de horas tratando de resolver el siguiente problema he llegado a una expresión que no puedo simplificar y por ende no puedo llegar a la ecuación general, así que quedamos tablas: Karina 1 - Métodos Recursivos 1.

El motivo de la siguiente rima no tiene explicación, mas que me cala muy hondo (aunque las cosas, quiero creer, no son tan trágicas ni tan definitivas). Es la rima XXX:

Asomaba a sus ojos una lágrima
y a mis labios una frase de perdón...
habló el orgullo y se enjugó su llanto,
y la frase en mis labios expiró.

Yo voy por un camino, ella por otro;
pero al pensar en nuestro mutuo amor,
yo digo aún: "¿Por que callé aquél día?"
y ella dirá. "¿Por qué no lloré yo?"


Y ya, fin.

1 comentario:

Runa dijo...

pasaba por aquí... precioso blog, la verdad =)

tenemos algunos gustos en común y eso me ha sorprendido :P

saludosss