martes, febrero 3

:(

cuando estás aplicando para un posgrado en el extranjero sólo hay algo peor que recibir una carta de rechazo: que te llegue una carta de aceptación pero sin oferta de financiamiento. La sensación de quedarte a mitad del camino es horrible. Aunque ése fue uno de mis mayores temores, no fue ésa mi situación en su momento; pero ahora vivo algo parecido en un contexto diferente. Todo indica que debo renunciar a mis planes de jugármela a ser la chica de Ipanema este verano. Ya me dijeron que sí y he estado trabajando para hacer un buen papel y a la par he tratado de buscar oportunidades, pero no hay dinero por ningún lado. Las únicas formas de describir cómo me sentí son: como Amélie cuando se entera que Nino estaba con otra chica, que se desbarata como un cubetazo de agua contra el suelo; y encontrándole total sentido a esta cita de Adam Smith de su libro Theory of Moral Sentiments: "We suffer more, it has already been observed, when we fall from a better to a worse situation, than we ever enjoy when we rise from a worse to a better. Security, therefore, is the first and the principal object of prudence." El problema es que aunque uno trate de ser prudente, hay cosas que no están en nuestras manos y en eso ya no nos podemos meter. Pero no me importa, o al menos trato de que no me importe mucho; ya fue suficiente con estar con cara larga todo el día. Aún tengo una semana más para buscar por otro lado. Ser terca, mula y aferrada debía tener su lado positivo algún día...